Mi gatita “agne”
nos dio la oportunidad de compartir momentos increíbles en su vida terrenal, nos
acompañó durante 14 largos años. Siempre fue una gatita cariñosa, tierna,
coqueta y tragona. Compartimos días inolvidables que muy difícilmente podremos
olvidar, desde que era un cachorro, me conquistaron sus ojos azules y sus
maullidos, era una bola de pelos blancos que se movía para todos lados.
Compartimos momentos
felices-tristes, alegres-nostálgicos, simples-difíciles. Pero por lo general
fueron días joviales, radiantes, risueños y afortunados. Claro que la voy a extrañar
porque me acompañó en los momentos más difíciles
de mi vida, porque su cariño y aprecio son incondicionales. También vivimos momentos
inolvidables en el Municipio de Xochitepec, Estado de Morelos, allá la bañábamos
se relajaba mucho y directo la mandábamos a dormir.
Su estado de
salud fue decayendo se pensaba que con las inyecciones, medicamento pediátrico y
pastillas iba a mejorar, pero no fue así. El sábado pasado fui con el
veterinario para notificarle que mi gatita estaba en un estado de salud
deplorable. Me comenta: el lunes la examino para hacerle estudios de orina y
sangre, y determinar la patología que tiene.
Pero ayer en
la noche mi gatita estaba peor, tenía la esperanza que hoy con el estudio que
le hicieran podría mejorar. Pero no fue así, a las 10:30 hrs., la doctora la revisa
y me dice: la gatita está muy mal porque al parecer es el corazón, pulmones
y riñones; tiene retención de líquidos y problemas graves para respirar. Me costó
mucho trabajo hablar, le digo: a que se debe esto. Me dice: es un proceso
natural degenerativo por la edad, le podemos dar medicamento de por vida para
el corazón. A duras penas le digo: no, sabes, mejor dale paz y descanso, por
favor.
A las 12:00
hrs deja de latir su corazón y cae en un profundo sueño del cual jamás podrá
despertar. La doctora me la entrega a las 13:30 hrs., me da un abrazo y me dice con la voz quebrada:
aquí te acompañan tus sueños e ilusiones. Me costó mucho
trabajo decirle: Gracias. Estaba con nosotros una niña: nos dice parece que
está dormida la gatita.
Aproximadamente
a las 14:00 hrs., le habló a mi hermano para notificarle que la gatita la
sacrificaron porque su estado de salud estaba muy deteriorado. Me dice: que
mala onda a esa gatita la queríamos mucho. No pude articular palabra alguna porque
me gana el nervio, me puse a llorar. Como pude le digo: fue lo mejor, porque
dejó de sufrir, solo ella sabe los dolores y malestares que tiene, estaba
sufriendo mucho.
Posteriormente
le habló a mi hermana y a sus hijos, les comentó: la gatita ya falleció porque
estaba muy malita. Me dice mi hermana: fue lo mejor dejó de sufrir............estaba viendo en las noticias que los animales son parte integrante de la familia.............fueron muchos años los que vivió con ustedes, 14 años.....................te acuerdas de nuestro vecino (cuyo) fueron meses que convivimos con él y cuando ya no estaba, se siente su ausencia.............éso pasa cuando nos encariñamos con los animalitos. Le habló a mi mamá para darle la noticia de la gatita, me
dice con la voz cortada y llorando: pobre de mí gatita, chiquita, ya dejó de sufrir.
Para muchas
culturas antiguas se tiene la creencia que cuando un animal allegado a nosotros
muere, es porque el animal se lleva el dolor, sufrimiento, mala energía y mala
vibra que haya tenido su dueño. Los antiguos egipcios creían que los gatos tenían
poderes divinos porque alejaban a los malos espíritus. Para otras culturas los
felinos son sagrados, nuestro antepasados, creían que el jaguar era un dios que
protegía las selvas.
Siempre te
recordaremos “agne”, descansa en paz, ya que fuiste parte integrante de esta
familia. Te ganaste el cariño y amor de todos nosotros porque fuiste una gatita
muy linda que nos acompañó en este arduo camino, pero nos guiarás, cuidarás y
velarás nuestros sueños. Y algún día nos encontraremos para vivir por siempre
en la eternidad contigo y con nuestras otras mascotas que ya fallecieron.
Al terminar de
escribir este artículo, tengo lágrimas en los ojos.
Hoy no salí para nada no tenía ánimos para andar en la calle. Pero que sensación tan extraña y rara, se siente ahora que ya no está mi gatita
ResponderEliminarEn el transcurso del día han venido a buscar a mi gatita sus amigos, dos gatos: uno es amarillo con blanco y el otro gris varios tonos. Estoy en la recámara con la puerta semiabierta los dos gatos empujan la puerta y andan buscado a su amiga. El gato amarillo hasta me espantó porque la única que abría la puerta de esa manera era mi gatita. De repente la puerta se abre veo unas orejas blancas y unos bigotes blancos, me quedé estático no supe que pensar. Era el gato amarillo, le digo: condenado gatito me espantaste. El gato se salé casi volando.
ResponderEliminarMi gatita tenía de amiga una ardilla a veces jugaban en el jardín. Nunca tuve oportunidad de fotografiarlas o de filmarlas, para que vieran que bien se llevaban. La primera vez que vi a mi gatita con la ardilla en el jardín, dije: en la torre se van a pelear pero no fue todo lo contrario empezaron a jugar.
ResponderEliminarSe me olvida comentar algo bien importante a mi gatita le gustaba la música New Age. Los CDs que más le agradaban: Desert Solitaire de Steve Roach; Songs of Ecstasy de Pilgrimage; y Suspendend Memories Forgotten Gods de Jorge Reyes. Me dí cuenta en reiteradas ocasiones, cuando yo ponía estos CDs mi gatita se iba a sus lugares favoritos de la sala y comedor. Entraba en éxtasis y caía en un profundo sueño, creo que estas melodías la relajaban muchísimo.
ResponderEliminarLe encantaba el CD: Desert Solitaire de Steve Roach y más la melodía Flatlands. Cómo la ven, apreciables lectores.
Al norteamericano Steve Roach lo conocí en persona en dos ocasiones: la primera vez, en el Espacio Escultórico de Ciudad Universitaria, y la segunda vez, en el Teatro de la Ciudad México junto con el etnomusicólogo Jorge Reyes. En la década de los 90s, gloriosos, impactantes y tremendos conciertos en vivo del género musical New Age.
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