Desde la comodidad del hogar
termine de leer el libro “Dirección de Capital Humano” lo leí porque todo el
tiempo que tengo trabajando en la “Empresa Servicio de Transportes Eléctricos
del D. F.” siempre me he hecho una y otra vez la misma pregunta: En verdad esto
será una empresa o que es.
Por qué me hacia esta pregunta,
desde que ingrese (24-julio-1985) no daba crédito a las distintas situaciones
que vivía la clase trabajadora por los abusos de la “agrupación sindical”
Alianza de Tranviarios de México. Han cometido todo tipo de abuso en lo
individual o grupal y pobre de aquel trabajador o trabajadora que cayera en la
gracia de algún lidercillo, porque chiquita no se la van acabar.
Sus abusos van desde una simple
amenaza hasta llegar a los golpes, su “política” se estructura en la mentira,
chismes, intimidación, hipocresía, arrogancia, despotismo, prepotencia, insultos
obscenos, mentadas de madre, entre otras. Ayudan y favorecen a los que son
arrastrados, a los que les deben favores, a sus familiares, etc., etc. Si algún
trabajador comienza a sobresalir sin tomar en cuenta a esta camarilla, rápido
éste es bloqueado, agredido y olvidado. Para que no se le olvide quién manda en
Transportes Eléctricos, quién toma las decisiones y quién decide.
Si perteneces a esta organización criminal
no debes pensar, no debes accionar, no debes razonar, no debes desobedecer una
orden porque si lo haces. Primero te van a pendejear, a humillar, si te va
bien. Si no, te van a mandar a chingar a tu madre de Transportes Eléctricos. Y te
van a exhibir como ejemplo para que a todos les quede claro quién o quiénes son
los chingones. Sin olvidar que este disque sindicato cuenta con el apoyo de los
de “arriba” por eso se sienten a sus anchas para hacer y deshacer en su
empresa.
Comencé desde la fecha arriba
señalada a analizar por qué esta organización criminal es así y a preguntarme
en verdad Transportes Eléctricos es una empresa. La primera conclusión a la que
llegue fue que efectivamente nuestra Constitución Política regulaba a los
sindicatos incluso los protegía ante cualquier autoridad que los quisiera
investigar. Segunda conclusión reciben grandes cantidades de dinero por “Contrato
Colectivo” y por cuotas sindicales: claro sin entregar cuentas a nadie, por qué las arcas del sindicato no tienen dinero. Y tercera conclusión por qué esta
empresa no produce nada y siempre está en números rojos.
Cuando hago mis estudios en la
Facultad de Derecho me generan un tremendo vacío, porque las leyes nos indican
que cualquier conducta ilícita será sancionada con forma al Derecho Positivo Mexicano.
Pero aquí en esta empresa se cometen a diario un sinfín de conductas aberrante
sobre la base trabajadora, y no pasa nada. Todo sigue igual estos individuos
están como la dulce mañana, a toda madre.
En las materias (Derecho
Mercantil 1 y 2, y Contratos Mercantiles) que lleve con el estupendo, inolvidable
y apreciable Maestro Oscar Vázquez del Mercado Diez estudiamos qué es una
empresa, cuáles son su fines, sus metas, principios, requisitos de existen y
validez, y terminación. Con el Maestro Acosta Romero estudiamos el Derecho Administrativo
como debe de trabajar la función pública y evitar la burocracia. Estas materias
me llevaron a la siguiente deducción: Esta pinche “empresa” (STEDF) donde
trabajo no es una empresa. Es un abanico de encubrimiento, corruptelas y
corrupción de poca madre, lo más importante es proteger a esta organización
criminal y de aquí lleguen los recursos a los políticos para sus campañas.
Cuando estudie Ciencia Política
analizamos a la empresa desde el modelo de producción básicamente el modelo
japonés. Y de nueva cuenta dije: aquí donde trabajo no es una empresa es una maldita
burla.
Es triste y lamentable que
nuestros políticos engañen a la ciudadanía pero es más culero que la ciudadanía
a través de sus impuestos enriquezca a esta agrupación criminal que parece no tener
fin. Como es sabido por todo el mundo STEDF es una empresa subsidiada donde una
parte mínima es para los pésimos salarios de los trabajadores, otra para los
gastos de la empresa y otra para la organización criminal. Así que si quitan el
subsidio esta supuesta empresa automáticamente desaparece porque no produce
nada, no es competitiva, ni hay ganancia. Los supuestos puestos de confianza o
dirección no están interrelacionados cada quién hace las cosas de forma
mecánica y rutinaria. No existe una coordinación en sus funciones los puestos
están dados a personajes ineptos que hacen las cosas nada más porque las tienen
que hacer no saben cómo ordenar, dirigir y están en espera de recibir órdenes
de los de “arriba”. Los nombramientos son dados por amiguismo, compadrazgo, por
dedazo o por órdenes de “arriba”.
Una y otra vez me hacia la
siguiente pregunta: hasta cuándo se va acabar esta maldita impunidad y corrupción
en Transportes Eléctricos. Y parece que por fin esta estructura de nepotismo y
abusos empieza a caerse con la entrada de la tarjeta TDF al Tren Ligero. Es por
eso que decidí leer el libro Dirección de Capital Humano de forma sencilla nos
describe cuales son las partes que integran una empresa, los puestos de
dirección, gerencia y supervisión pero sobre todo como se debe de seleccionar
al personal para que funcione la estructura orgánica. Cuáles son las cualidades
que debe tener un líder y lo más importante buscar la ganancia y el lucro a
nombre y representación de la empresa.
Me gustó mucho este libro y de
nueva cuenta me hago la siguiente pregunta: hasta cuándo se va a seguir alcahueteando
a Transportes y a la camarilla de sindicato.